El cobro sin contacto es una tendencia más que establecida en el mercado. Hablamos de las ventajas del renting de cajas de cobro y el renting de tpv.
En los últimos años, se ha instalado el pago automático, con la llegada de cajas de cobro automáticas. Un avance que ha tomado un acelerón bastante pronunciado por la llegada de la pandemia. El mismo cliente introduce los billetes y monedas, sin que el dinero pase por las manos de la persona que trabaja al otro lado del mostrado. Tienes la caja permanentemente cuadrada, no hay errores de devolución y detecta billetes y monedas falsos. Otro de los imprescindibles en cualquier negocio, es el tpv, para mejorar la gestión de la venta.
Incorpora a tu negocio cajas de cobro automático en renting
- Aportan seguridad: el dinero está protegido bajo llave. Además, verifican la autenticidad de las monedas y billetes. Las máquinas de cobro automático son una especia de caja fuerte, el dinero que entra se queda ahí.
- Mejoran la gestión: aportan control, evitan descuadres por equivocaciones o posibles hurtos.
- Son prácticas y se autoabastecen: dan el mejor cambio a cada cliente, la menor cantidad de monedas o billetes. Además, evitan quedarse sin cambio.
- Facilitan información: puedes conocer en qué estado se encuentra el cajón automático de cambio.
- Agilizan procesos: ahorran tiempo en ventas y reducen las esperas. Lo que se traduce en una mejor atención al cliente.
- Son modulares y escalables: permiten trabajar con varios módulos de billetes para trabajar de forma paralela y simultánea entre ellos.
- Adaptables al mostrador y compatibles con tu software: se integran de forma natural y coherente en el espacio de venta.
- Son higiénicas: evitan el contacto y los gérmenes restantes en las monedas. Algo fundamental en la hostelería.
Un 2,5% de la población declaró que habían dejado de usar el efectivo por motivos de higiene a causa de la pandemia, según el Banco Nacional de España.
De cajas de cobro las hay para todos los gustos, máquinas de cobro automático compactas, fáciles de usar e instalar, cajas de cobro automático modulares y escalables… Están en restaurantes, cafeterías, bares, heladerías, panaderías, estancos, farmacias, tiendas de ropa…
Desde Iberent Technology ofrecemos el renting de cajas de cobro. Así como el renting de TPV con datáfonos, también para hostelería.
Simplifica los cobros con el renting tpv de Iberent
Un TPV es un sistema que los negocios utilizan para gestionar las operaciones de venta. Y uno de los dispositivos más usados en la mayoría de los comercios: facilita el cobro con tarjetas de crédito o débito, así como imprimir tickets, incluso sirve para controlar el inventario. Pueden incluir todo tipo de accesorios: lector de códigos de barras, impresora de recibos, lector de tarjetas o cajón de efectivo. Tan solo se necesita un dispositivo con conexión a internet para manejar la aplicación de terminal punto de venta.
Lo más importante del tpv es el datáfono, que permite a los comercios cobrar con tarjeta. ¿Sabías que hay TPV’s para tiendas físicas y también para tiendas online? Existen TPV virtuales para los e-commerce, para gestionar el cobro de tarjetas de crédito o de débito desde la red.
El tpv online es un software que automatiza los procesos habituales de venta. A diferencia del tpv físico, permite trabajar desde cualquier tienda, así como tomar decisiones rápidas y acertadas. Es la solución para las multitiendas. También para conectar la tienda física con un sistema de comercio electrónico o tienda online.
En Iberent Technology también ponemos a disposición de pymes y autónomos el renting de tpv y datáfonos para empresas.
Renting tpv hostelería y restaurantes
De ahí que alquiler de tpv para hostelería y el sector restauración sea uno de los más solicitados. Más aún teniendo en cuenta las ventajas del renting para pymes y autónomos: sin inversión inicial ni endeudamiento sin computar en CIRBE); preservando el capital, etc.
Cambios en la accesibilidad de efectivo
La facilidad de acceso al efectivo en oficinas bancarias, cajeros automáticos y oficinas de correos ha disminuido en todos los países de la zona euro considerablemente. Esto se debe al ajuste del modelo de negocio de la banca, así como de las fusiones entre entidades bancarias y al avance de la tecnología. Como consecuencia, cada vez hay menos cajeros automáticos. Según los últimos datos de oficina sobre oficinas bancarias, publicados por el Banco de España, ha habido una reducción del 10,86% de oficinas respecto al mismo periodo del año anterior.
Según las últimas informaciones, habría aproximadamente unas de 20.421 oficinas, la cifra más baja registrada desde junio de 1977, con 20.387 sucursales bancarias. Además, supone un descenso del 55,72% con respecto al máximo histórico de 46.118 sucursales abiertas en septiembre de 2008.
Es más, según un artículo publicado en 2020 por el Banco de España, ya por entonces había más de 1,2 millones de personas sin acceso a efectivo. Es decir, sin un punto tradicional con de acceso a efectivo en su municipio.
Ya fuera de España, en Irlanda, Reino Unido o Australia, se utilizan oficinas de postales como medio alternativo para disponer de efectivo. Algo muy extendido en zonas rurales, mientras que en España es poco habitual.
¿Ha influido la actual pandemia en el uso de efectivo?
Antes de la pandemia, el método de pago preferido era el efectivo, tal como apunta un estudio, Cierre de Oficinas y acceso al efectivo en España, publicado en 2017 por el Banco de España. Aunque ya se intuía un descenso del efectivo, se ha acelerado con la pandemia. Un estudio de la zona euro de julio de 2020 reflejaba como 4 de cada 10 encuestados había reducido el uso del efectivo desde el inicio de la pandemia.
Según la última Encuesta Nacional sobre el uso de efectivo publicada en julio 2021 con del Banco de España el 36% de los encuestados manifiesta que el efectivo es su medio de pago más habitual. Con lo que ha quedado relegado a un segundo lugar tras el pago con tarjeta de débito. Dicha encuesta estaba dirigida al público en general, hostelería y pequeño comercio. Así como a gestores de grandes superficies y cadenas de distribución nacionales.
